La minería, una actividad antigua y de fuerte perfil tradicional, ha vivido en cien años los mayores cambios de su historia, sobre todo en materia de eficiencia y seguridad. Esta transformación se ha culminado en los últimos años, cuando las tecnologías vinculadas a la Industria 4.0 han comenzado a implantarse en el sector. La Automatización, la Inteligencia Artificial o el uso de drones son solo algunos ejemplos en el avance hacia una nueva Minería 4.0 que aspira a una explotación sostenible, segura y productiva.
Durante mucho tiempo ha sido considerado como un sector tradicional, pero su carácter rudimentario no le ha impedido crecer tecnológicamente, especialmente en los últimos años, en los que la inversión en tecnología y capital humano han marcado fuertemente sus progresos. Se puede resumir en cuatro los grandes elementos que han condicionado la evolución de la minería en las últimas décadas: la mejora en la seguridad, el incremento en la productividad, el cuidado del medio ambiente y el uso más eficiente de los recursos. Estos factores confluyen en el objetivo de trabajar en pro de una minería cada vez más sostenible, mejor percibida e integrada en la sociedad y que, además, no deja de perseguir nuevas mejoras.
La modernización en el sector minero es crucial no solo para incrementar la productividad, sino también para garantizar la seguridad de los trabajadores. Según un informe de Ericsson, el uso de herramientas como la telemetría, la geolocalización satelital y los sensores inalámbricos, combinados con la velocidad de la red 5G, permite obtener información en tiempo real sobre las operaciones mineras. Esta capacidad de monitoreo y control a distancia reduce significativamente los riesgos a los que se exponen los mineros (Calderón, 2022).
Fernán Izquierdo, VP de Desarrollo de Negocio y Ventas para Latinoamérica de Ericsson, subraya que “la minería 4.0 puede reducir hasta un 10 por ciento las muertes y hasta un 20 por ciento las lesiones en entornos de minería, ya que los mineros del futuro no tendrán que bajar a la mina, operando en un entorno de riesgo mucho menor”. Este cambio no solo impacta en la seguridad, sino que también aumenta la eficiencia y sostenibilidad de las operaciones.
A pesar de estos avances, la industria minera en México todavía enfrenta grandes desafíos en cuanto a la adopción tecnológica. La Cámara Minera de México (Camimex) reporta que las mineras del país apenas destinan 44.5 millones de dólares anuales a inversión tecnológica, lo que representa solo el 0.8 por ciento de su gasto de capital. Este bajo nivel de inversión es preocupante, especialmente cuando se considera que apenas una tercera parte de las minas en México tienen acceso a internet.
Sin embargo, la tecnología ha comenzado a mostrar su impacto positivo. La Camimex informó que la tasa de incidentes en el sector minero se redujo en un 18.5 por ciento en comparación con 2019. Karen Flores, directora general de Camimex, señaló durante el evento Imagine Live Ericsson que “la automatización que la red 5G supone nos brindará mayores índices de seguridad en nuestras operaciones”, destacando que la seguridad es un pilar fundamental para la minería moderna y responsable.
La expansión de la red 5G y la adopción de tecnologías avanzadas no solo mejoran la seguridad, sino que también incrementan la productividad de las minas. Según Ericsson, se espera que estas tecnologías impulsen la producción minera en hasta un 10 por ciento (Calderón, 2022). Además, la automatización contribuye a la eficiencia energética, un objetivo crucial en la lucha contra el cambio climático.
Fernán Izquierdo explicó que “automatizar la minería no solo incrementa la producción, sino que también reduce el consumo de energía y combustible. Con un sistema de ventilación inteligente, se puede reducir el consumo de energía hasta en un 60 por ciento, y al automatizar vehículos, se ahorra hasta un 30 por ciento de combustible”.
LMéxico es un país con una rica herencia minera y un papel crucial en el suministro de minerales a nivel mundial. Sin embargo, para mantener su competitividad y seguir avanzando hacia una minería más segura y productiva, es imperativo que las empresas mineras adopten las tecnologías de la Industria 4.0. Chafic Nassif, presidente para Latinoamérica Norte y el Caribe de Ericsson, afirma que “México es pionero en la implementación de 5G, y su lanzamiento ha sido un gran catalizador para la industria 4.0” (Calderón, 2022). No obstante, para que el país aproveche plenamente los beneficios de esta tecnología, es necesario fomentar un entorno que facilite su despliegue.
El sector minero se enfrenta a múltiples desafíos. Según Ángel Cámara Rascón, Doctor Ingeniero de Minas y Catedrático de la Escuela Técnica Superior de Minas y Energía de la UPM, “la nueva minería está inmersa en la búsqueda continua de soluciones para desarrollar yacimientos cada vez más complejos, profundos y con leyes de mineral más bajas”. La automatización y el análisis de datos en tiempo real están emergiendo como herramientas clave para enfrentar estos retos (MAPFRE Global Risks, 2024).
Cámara Rascón enfatiza que la evolución tecnológica en minería no solo abarca la automatización y la robótica, sino también la inteligencia artificial, el Internet de las Cosas, y el uso de drones y gemelos digitales. Estas tecnologías permiten optimizar procesos y mejorar la seguridad y eficiencia en la extracción de minerales, desde la exploración hasta la comercialización.
En España, por ejemplo, la presión social y las exigencias medioambientales han llevado al desarrollo de modelos de explotación de bajo impacto ambiental, como la “Minería verde” o “Minería sostenible”. Estos modelos son fundamentales para asegurar que la minería siga siendo viable y responsable en el futuro.
La minería está en una encrucijada histórica. La adopción de tecnologías avanzadas no es solo una opción, sino una necesidad para garantizar la seguridad, eficiencia y sostenibilidad del sector. Con la implementación adecuada, la Minería 4.0 no solo impulsará la productividad, sino que también salvará vidas, consolidando a México como un líder en la minería del futuro.
La revolución tecnológica en la minería también requiere un cambio en el capital humano. El perfil del “nuevo minero” debe adaptarse a las exigencias de la automatización, digitalización e interoperabilidad. El desafío radica en capacitar a la fuerza laboral y en asegurar que los beneficios de la minería sostenible se distribuyan equitativamente entre todos los involucrados.
En resumen, la transformación tecnológica de la minería promete un futuro más seguro, eficiente y sostenible, pero también plantea desafíos significativos. Con el compromiso de empresas, universidades y profesionales de la investigación, el sector minero tiene la oportunidad de liderar una revolución que beneficie a toda la sociedad.
by: Ph.D. Carolina Hernández Valerio
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